El presidente Andrés Manuel López Obrador está en Nueva York para participar en el Consejo de Seguridad de la ONU, que México encabeza durante noviembre.
El mandatario mexicano participará en el debate “Mantenimiento de la paz y seguridad internacionales: exclusión, desigualdad y conflicto”, donde hablará también de corrupción.
Anunció que el objetivo es garantizar el derecho a una vida digna a 750 millones de personas que sobreviven con menos de 2 dólares diarios, por lo que la representación de México presentará esta propuesta a la Asamblea General del organismo.
“Es necesario que el organismo despierte de su letargo y salga de la rutina, del formalismo, que se reforme y que denuncie, combata la corrupción en el mundo, que luche contra la desigualdad y el malestar social que cunden en el planeta. Con más decisión, profundidad, con más protagonismo y liderazgo, nunca en la historia esta organización ha hecho algo sustancial en beneficio de los pobres, pero nunca es tarde para hacer justicia», expresó ante los representantes de la ONU.
López Obrador que los recursos se podrían obtener de un fondo procedente de las siguientes tres fuentes:
-Contribución voluntaria anual de 4 por ciento de las fortunas de las mil personas más ricas del planeta
-Contribución voluntaria anual de 4 por ciento de las mil corporaciones más importantes
-Contribución del 0.2 por ciento del PIB de cada país integrante del G20
El mandatario mexicano informó que de concretarse este fondo, se podrían obtener cerca de 1 billón de dólares; además, dijo, la ONU podría destinar un día para otorgar reconocimientos de solidaridad a las personas, corporaciones y gobiernos que destaquen por su vocación humanitaria para apoyar a financiar el Plan Mundial de Fraternidad y Bienestar.
Indicó además que los apoyos económicos deberían ser entregados de manera directa a los beneficiarios, sin intermediación alguna, pues organizaciones, en muchos casos «el dinero se queda en aparatos burocráticos, en pagar oficinas de lujos, en mantener asesores o se desvía y termina por no llegar a los beneficiarios».
De acuerdo con la propuesta del presidente de México, la entrega de recursos se podría llevar a cabo mediante una tarjeta o monedero electrónico personalizado, por lo que el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional podrían colaborar en la creación de la estructura requerida.
También comentó en la necesidad de realizar un censo de los más pobres del mundo, y una vez definida la población objetivo de cada país comenzar la distribución de los apoyos para el otorgamiento de pensiones a adultos mayores, a niñas y niños con discapacidad, becas a estudiantes, apoyos a sembradores y jóvenes que laboren como aprendices en actividades productivas; así como hacer llegar vacunas y medicamentos gratuitos.
