Lluvias torrenciales en la ciudad brasileña de Petrópolis, al norte de Río de Janeiro, dejando a 104 personas fallecidas, con el riesgo existente de nuevos deslizamientos y precipitaciones, los rescatistas y voluntarios aún siguen en busca de sobrevivientes.
Se dice que a primera hora, vecinos de la zona continuaban buscando entre el lodo a los desaparecidos que fueron arrastrados por la corriente del río el martes pasado, se tiene declarado que ha sido una de las peores tormentas de lluvias registrada en los últimos 90 años .
La Defensa Civil del lugar advirtió de que “hay previsión de lluvias fuertes para la tarde y la noche, lo que puede complicar todavía más las tareas de rescate, en las que son usados perros, máquinas excavadoras, camiones, botes y una decena de aeronaves”.
Claudio Castro, gobernador de Río de Janeiro, afirmó que esta ha sido “la peor lluvia desde 1932″ y demostró “un déficit que realmente existe” en infraestructura y vivienda.
Se reportó que en estos tres últimos meses Brasil ha vivido episodios de intensas lluvias, especialmente en los estados de Bahía, al noroeste, y de Minas Gerais, al sudeste, que han dejado decenas de muertos y causado destrozos en centenares de municipios.
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