El presidente, Andrés Manuel López Obrador, defendió titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero, tras la filtración de una llamada que exhibía su presunta manipulación en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCNJ) para el caso de Alejandra Cuevas.
Dicho audio revelaría una conversación con el fiscal de Control Competencial, Juan Ramos López, en la cual Gertz tildaba de “ridículo” el proyecto de la Corte. Esto, debido a que el ministro presentador, Alberto Pérez Dayán, “no puso ni una línea” del contenido pactado, por lo que prácticamente se liberaba a Cuevas, acusada del asesinato de Federico Gertz Manero, hermano del Fiscal General.
Sin embargo, tras decirse ignorante del contenido de la misma, el mandatario se expresó comprensivo del caso de Gertz, ya que, afirmó, “es un asunto vinculado con su hermano”: “Lo entiendo”, comentó.
“Yo entiendo la situación moral y humana del Fiscal porque es un asunto vinculado con su hermano. Entonces él quiere que se haga justicia, la otra parte está defendiendo su versión de los hechos. De todas formas, va a ser en el Poder Judicial donde se va a resolver”.
Y es que, según el audio, el ministro de la Ciudad de México habría acordado registrar que sí hubo delito por parte de Cuecas, “participación y no complicidad”, pero nada de eso fue colocado.
Ante ello, Gertz refirió: “Es ridículo. No dice que la propia ‘pendja’ que está en la cárcel, en auto ella dijo lo que dice que no hacía, y después de hacer toda esa descalificación, muy cabrn y muy cobarde, más cobarde él dice: ‘yo me lavo las manos’”.
Cuestionado por dicha descalificación, Andrés Manuel minimizó la situación al declarar que “también habla mal o no tiene confianza” de ministros o jueces “que no han demostrado actuar con rectitud”.
“Si él habla mal de los ministros, es su visión de las cosas (…) No han entendido que deben de hacer justicia pensando en todos y no solamente en las minorías y hay quienes solo actúan como jueces de grupos de intereses creados”.
Tras la vuelta de Gertz al ojo del huracán, el Consejo General de la Abogacía Mexicana (CGA), advirtió que la intervención de la línea por la que supuestamente se comunicaron el Fiscal General de la República y el Fiscal Especializado en Control Competencia debe ser investigada e incluso perseguida legalmente.
Esto, bajo el argumento de que “ya todas las formas existentes de comunicación están protegidas por el derecho fundamental a la inviolabilidad de las comunicaciones privadas y la intervención de las mismas configura el delito previsto y sancionado en el artículo 177 del Código Penal Federal”.
También consideraron que, de confirmarse la veracidad de dichas conversaciones, se puede advertir “un conflicto de interés y comportamiento no ético por la aparente injerencia de dos altos funcionarios encargados de la procuración de justicia”.
Dentro del caso, también señalaron que Alejandro Gertz-Manero es, en lo personal, la parte agravada; es decir, el hecho de que tenga en su poder un proyecto de resolución de la SCJN no público, daría muestra de una ventaja indebida que afecta la equidad procesal.
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